Se los conoce vulgarmente como garrapatas. Éstos parásitos pertenecen a la familia de los ixodoideos. Son un peligroso agente transmisor de enfermedades que afectan tanto a humanos como animales.
Las garrapatas son pequeñas criaturas similares a insectos que se le pueden adherir a medida que usted va pasando por entre arbustos, plantas y pasto. Una vez que se le pegan, las garrapatas se desplazan hasta lugares calientes y húmedos, como las axilas, la ingle y el cabello. En ese punto y de manera típica, se adhieren firmemente a la piel y comienzan a chupar sangre. Las garrapatas son importantes, ya que pueden transmitir bacterias que causan enfermedad. Las garrapatas pueden ser bastante grandes (aproximadamente del tamaño del borrador de un lápiz) o tan pequeñas que es casi imposible verlas. Hay aproximadamente 850 tipos diferentes de garrapatas. Las garrapatas pueden causar una variedad de problemas de salud que van desde casos inofensivos hasta problemas serios.
Se cree que las hembras de cuerpo duro y suave producen un tóxico que puede causar parálisis por garrapatas en niños. Aunque la mayoría de las garrapatas no transmiten enfermedades, algunas pueden portar bacterias que pueden causar: Fiebre por garrapatas de Colorado, Enfermedad de Lyme, Fiebre maculosa de las Montañas Rocosas, Tularemia… Estas enfermedades, al igual que otras, pueden causar daño al corazón, al sistema nervioso, al riñón, a las glándulas suprarrenales y al hígado, y pueden provocar la muerte.
Esté atento a los síntomas de enfermedades transmitidas por garrapatas, como dolores articulares o musculares, rigidez en el cuello, dolor de cabeza, fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos y otros síntomas similares a la gripe, en las semanas siguientes a la picadura de este insecto. Asimismo, esté atento a una mancha roja o brote que se inicie en el lugar de la picadura. Si su entorno o su domicilio es visitado frecuentemente por garrapata, no dude en consultarnos para ofrecerles un tratamiento efectivo.